Cáritas Diocesana de Tenerife ha lanzado una campaña para canalizar el apoyo y la solidaridad ciudadanas con la población de la isla de La Palma, damnificada por los efectos del severo fenómeno vulcanológico que se desencadenó el pasado domingo.
Con ese fin, la entidad ha habilitado la cuenta corriente ES02 2100 6722 6122 0073 3169 para orientar la ayuda de emergencia a las personas afectadas por esta catástrofe natural a la que se enfrentan nuestros hermanos y hermanas de la Isla Bonita.
De igual modo, también se pueden realizar aportaciones a través del código 03762 del sistema BIZUM, la aplicación bancaria que podemos descargar en nuestros teléfonos móviles.
Cabe señalar que entre los afectados que han tenido que ser evacuados y que han perdido sus viviendas se encuentran distintos agentes de Cáritas de las comunidades parroquiales de los municipios de El Paso y Los Llanos de Aridane.
Cáritas Diocesana de Tenerife articula su trabajo en dos arciprestazgos en la isla de La Palma, en Santa Cruz de La Palma y Los Llanos de Aridane. Además de la acogida y el acompañamiento a las familias más vulnerables, se desarrolla el proyecto Mila, de empleabilidad de personas en situación de exclusión social o en riesgo de padecerla; y el proyecto de Unidades Móviles de Atención en Calle para personas sin hogar. En total, el año pasado se atendieron en la isla a 1.300 personas a través de las parroquias y de los distintos proyectos y programas que desarrolla la entidad diocesana.
Con objeto de realizar un seguimiento estrecho de la evolución de esta emergencia, Cáritas Diocesana de Tenerife ha constituido un gabinete de crisis con objeto de identificar las necesidades más urgentes de la población afectada e ir definiendo en el corto y medio plazo las respuestas más adecuadas a la evolución de la misma.
Así mismo, Cáritas Diocesana de Tenerife valora positivamente la rapidez de las Administraciones públicas a la hora de velar por la seguridad de todas las personas afectadas y garantizar el cuidado quienes están en situación de mayor vulnerabilidad, aquellos que son el centro de nuestra acción. De igual modo, queremos ofrecer nuestra colaboración y total disposición ante los efectos sociales causados por esta emergencia. Sumamos nuestros esfuerzos y recursos a los de los agentes sociales e instituciones presentes en las zonas afectadas y de toda la Isla, compartiendo con ellos el compromiso y la solidaridad que nos mueve como Iglesia.
Expresamos toda nuestra cercanía a los damnificados y lanzamos un mensaje de ánimo a la población palmera en general y, muy especialmente, a las personas y familias que se están viendo afectadas por esta histórica situación de riesgo volcánico. “CADA GESTO CUENTA”.
Actualizado 23 septiembre, 2021