Cáritas apuesta por una economía solidaria que pone a la persona en el centro, al servicio de los derechos humanos, y que prioriza el cuidado del planeta.
Entendemos la Economía Solidaria como la construcción de un modelo económico diferente y alternativo al sistema vigente. Un modelo que ya está en marcha y que se concreta en todo un conjunto de iniciativas promovidas por personas, comunidades, organizaciones y redes - sociales y académicas— que ponen a la economía al servicio de la justicia social y del ejercicio de los derechos humanos.
El Papa Francisco lo ha expresado con contundencia: “Así como el mandamiento de «no matar» pone un límite claro para asegurar el valor de la vida humana, hoy tenemos que decir «no a una economía de la exclusión y la inequidad». Esa economía mata.” (Evangelii Gaudium, 53 y 54).
Para ello, desarrollamos proyectos en los que la persona es el centro de la actividad económica.
- Programas de empleo inclusivo, que favorecen el acceso a un empleo digno a quienes tienen más dificultades.
- Iniciativas de economía social, que crean oportunidades laborales en empresas de inserción y cooperativas (en nuestro caso, 114 Espacio Creativo y Buscándome las Habichuelas).
- Compromiso con las finanzas éticas que aúnan beneficios sociales y económicos.
- Propuestas de comercio justo y consumo responsable como herramientas de transformación social.
- Otras acciones que ponen en valor la solidaridad y promueven el tejido social y comunitario.
El papel de todos los actores que intervienen en la actividad económica es importante. Por ello, la colaboración con las empresas es vital para avanzar hacia la construcción de una economía solidaria.