«Bendita la hora en la que el párroco me invitó a formar parte de Cáritas»

FOTO ESTHER ICOD

María Esther Hernández González es una de las voluntarias más veteranas y activas del Arciprestazgo de Icod de los Vinos. Secretaria de la Cáritas interparroquial de San Marcos, lleva más de una década de servicio en la entidad, a la que confiesa que llegó tras la invitación del que entonces era su párroco, Don Rubén José Fagundo.

“Bendita la hora en la que me invitó a formar parte de Cáritas”, explica Esther, que deja claro que se decidió por Cáritas para “prestar un servicio en la parroquia, ya que iba a dejar la catequesis, y al jubilarme y dejar de dar clases de Religión a los niños quería trabajar y relacionarme con personas de otras edades”.

Cambios positivos

Desde entonces, siempre ha estado dispuesta a echar una mano en lo que hace falta, y reconoce que ha vivido de forma muy positiva los cambios que se han producido en la institución en los últimos años, sobre todo los de su propio Arciprestazgo. No en vano, la Cáritas Arciprestal de Icod viene trabajando desde hace años en un proceso de transformación sobre el Modelo de Acción Social de Base, dando mayor relevancia a una intervención integral, donde prima la acogida y el acompañamiento a las/los participantes que acuden a nuestra entidad en busca de apoyo, poniendo siempre a las personas en el centro de toda nuestra acción. Para ello, están inmersos en la coordinación continua con las administraciones locales, con el objetivo de visibilizar las carencias en la atención a las personas, especialmente a las más vulnerables.

“Con la experiencia de cada día y de todos estos años de todas las personas que han trabajado y trabajan en la Casa, hemos ido aprendiendo y mejorado en la atención, para que la valoración y el trato a las personas participantes sea cada vez más humano y mejor”, incide María Esther, quien también es crítica con algunos de los espacios en los que todavía hoy se sigue realizando la acogida en algunas parroquias. “Creo que a veces nos falta espacio donde poder dar más intimidad a los participantes en el momento de la acogida”.

Acompañamiento

Aun así, esta voluntaria, como el resto de sus compañeras y compañeros del Arciprestazgo, están muy ilusionados con la nueva sede de la Cáritas Arciprestal en el centro de Icod de los Vinos, “y con los proyectos en los que estamos inmersos”.

En definitiva, se trata de dignificar procesos, acortando tiempos, superando las atenciones de ayudas por acompañamientos integrales y tratando de lograr una sociedad más justa, fraterna y solidaria.

 

Actualizado 10 octubre, 2022